El domingo de Resurrección, los cristianos, nos felicitamos con alegría, el Señor está VIVO, HA RESUCITADO.
Hemos celebrado con fe los misterios de nuestra salvación.
El Señor nos deja su presencia eucarística, da la vida por nosotros y nos regala su presencia resucitada.
Pascua es la primavera permanente en la que Dios quiere habitar entre nosotros.
¡FELIZ PASCUA RESUCITADA!