Ancianos

Los Ancianos: Tesoro de la Iglesia y de la Sociedad

En una sociedad, en la que muchas veces se reivindica una libertad sin límites y sin verdad en la que se da excesiva importancia a lo joven, los mayores nos ayudan a valorar lo esencial y a renunciar a lo transitorio. La vida les ha enseñado que el amor y el servicio a los suyos y a los restantes miembros de la sociedad son el verdadero fundamento en el que todos deberíamos apoyarnos para acoger, levantar y ofrecer esperanza a nuestros semejantes en medio de las dificultades de la vida”(Fratelli Tutti, 19).

Nos dará mucha luz considerar la pandemia del coronavirus como un tiempo de prueba. Un tiempo en el que se ponen a prueba nuestras convicciones y la profundidad de las mismas, un tiempo en el que muchas de nuestras seguridades se desmoronan y en el que estamos llamados a dar una respuesta. Con admiración contemplamos la entrega heroica de tantos profesionales y voluntarios que desde el ámbito civil y desde su compromiso de fe se han desgastado por atender a los más golpeados por esta crisis sanitaria. Entre estas víctimas ocupan un lugar privilegiado nuestros mayores. Aprendamos esta lección de la historia, ya que «en una civilización en la que no hay sitio para los ancianos o se los descarta porque crean problemas, esta civilización lleva consigo el virus de la muerte». De manera especial, esmeremos nuestros cuidados por los ancianos que están enfermos, sin olvidar que “el enfermo que se siente rodeado de una presencia amorosa, humana y cristiana, supera toda forma de depresión y no cae en la angustia de quien, en cambio, se siente solo y abandonado a su destino de sufrimiento y de muerte

Muchos de nuestros mayores, en la plenitud de su vida, elevan su mirada a la trascendencia, sabiendo discernir lo importante y prescindir de lo pasajero. Esta mirada suya es imprescindible en medio de esta sociedad que muchas veces se aferra a lo temporal y olvida nuestra condición de peregrinos en esta tierra que encaminan sus pasos a la eternidad.

Del Mensaje de los Obispos para la Jornada de la Sda. Familia 2020

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